Sharanagati
Collected words from talks of Swami Tirtha(Conferencia de B.K. Trihta Mahardj sobre Sharanagati – Parte 2, el î de septiembre 2006, Sofía)
Tratad de recordar los dos primeros elementos de Sharanagati: haz lo que sea favorable y evita lo que sea desfavorable para tu devoción. Los dos elementos siguientes que podemos llamar obligación subjetiva sn la humildad y la dedicación. Les he dado la denominación de prácticas subjetivas porque aquí se trata de nuestro aporte personal. Son cualidades anímicas que debemos adquirir.
Llegar a ser humilde – creo que es algo evidente . Sin embargo debemos llegar a serlo en un ambiente adecuado. Ser humilde en medio de una comunidad de tontos en fin de cuentas ellos lograran a hacer de ti un tonto igual a ellos. Ser humilde entre embusteros y mentirosos, ellos se burlarán de ti. Sin embargo, siendo humilde dentro de una comunidad de devotos, tú adquirirás también la cualidad de devoto.¿Porqué?
Es que el alma humana se parece a un cristal. El cristal absorbe y adquiere cualquier impacto del medio ambiente. Al poner un Cristal puro y transparente entre las manos de Damodar Prabhu*, ante sus pechos, el cristal reflejará la luz pura y blanca que de él se exhala. Dando el mismo cristal a la Madre Yashoda, aparecerán chispas de luz azul. Colocando el mismo cristal en medio de oscuridad y pésimas condiciones, él reflejara lo que lo rodea. Poned pues atención en vuestra humildad. No hay que ser cristales débiles. No hay que recibir ni absorber las malas vibraciones, hay que escoger y buscar sólo las buenas y puras vibraciones.
Shrila Shridhara Maharaj dice de la humildad: cuando un ladrón penetre en el templo y se apodere de los candelarios en el altar, ¿En qué consistirá nuestra humildad?¿ Acaso en decirle humildemente: „¿¡ Oh, Prabhu, aquí tienes el dinero del templo, cógetelo también”?! : Será ésta la humildad adecuada y oportuna? O le vamos a decir: „¡Eh, espérate un poco, te daré una paliza si te atreves a molestar a nuestro Dios !
Para comprobar aquí que no se trata de prescripción, ni de receta irrevocable, os voy a contar otra historia ligada con la humildad. Érase una ves un viejo monje ermitaño que vivía completamente aislado del mundo: tenía solamente una miserable choza y muy pocos bienes: uno que jarro, cosas menudas…Vino una vez un ladrón y se apoderó de todo lo que había en la choza. Estaba cargando a dorso de un asno lo que había robado cuando el ermitaño regresó y lo encontró en flagrante. Se dio cuenta de que la choza estaba vaciada y pillada y que todos sus bienes estaban cargados a dorso del asno pero vio que un mazo se quedaba todavía en un rincón del huerto. Entonces el viejo ermita le dijo: „¡Espérate un rato, amigo, allí esta mi mazo, cógetelo también!” Y sin más tardar colocó de sus propias manos a dorso del asno. Ya que a tal nivel era humilde aquel viejo y con esto ganó el respeto del ladrón. El ladrón comprendió inmediatamente y pensó: ”¡ He agraviado a este gran santo!” y aceptó al ermita como maestro espiritual.
¿Cuál es la diferencia entre las dos historias? En el primer caso, alguien está molestando el templo, en el segundo caso alguien os está molestando personalmente. Entonces, por Krishna, por la misión podéis luchar. Podéis defender el interés de Krishna. O podríamos decir – podemos prevenir a uno para que no cometa un grave error. Sin embargo, cuando alguien trate de apoderarse de alón bien de vuestra propiedad, en efecto esto es un acto de Krishna. Y si hubiera omitido algo, hay que recordárselo a El: ”¡ Eh, espérate un rato: me queda todavía esa o aquella afición o adicción – Te ruego que la recojas también!” Es que no quiero depender, no quiero ser adicto a mi mazo, sino que quiero pertenecerte, depender de Ti, Dios mío!
De modo que la humildad, la verdadera humildad debe practicarse. Por esto se recomienda hacerlo en compañía de santos. Y la segunda parte subjetiva de la devoción, el Sharanagati – esto es dedicarse por completo a ello. Existe la plegaria siguiente: „Te ruego me aceptes como Tuyo, como Tu segundo ser, como Tu segunda esencia”
La devoción se manifiesta en aquel nivel que corresponde a nuestra completa y abnegada entrega a Dios. En respuesta, Et también se entrega a nosotros.
La devoción es pues una cualidad específica de nuestra disposición a servir. Podéis limpiar el suelo con odio, podéis limpiarlo con devoción. No se trata de cumplir sencillamente con un deber. Si ésta es su profesión, si eres un hombre o mujer de limpieza – entonces estás haciéndolo a lo largo del día laboral. … Sólo esperas que llegue el fin de la jornada a las 16 y te olvidas de ello. Echas a un lado la escoba y te olvidas de ella. Pero siendo un devoto, ¿
¿Acaso te olvidarás de tu oficio y de tu servicio por Krishna, dondequiera que estés? De modo que no se trata únicamente de cumplir con tus deberes, ni siquiera de implicar en ello tus sentidos. ¡Entrega corazón y alma en el servicio! Esto es lo que llamamos dedicarse.
Creo que ya os dais cuenta de lo inmenso e inabarcable que es este campo – a partir de las prácticas elementales, llegar a lograr la devoción completa y sin reservas. Entonces, cuando no guardáis para vosotros ni siquiera la vida, cuando la dedicáis enteramente a Krishna.
Practicad pues la humildad de tal modo que no se ofenda ni moleste a otra gente. L La humildad no es espectáculo, no es show, es un acto. Los actos dicen más que las palabras. Decís „Hare Krishna” recorriendo dieciséis círculos del rosario al día y ¡¿ acaso ya no estáis listos a servir?! Y cuando lleguen invitados, ¿ Acaso no les ofrecéis un trozo de pan o algún vaso de agua? Invitáis a Krishna: „,¡Ven, adelante!”, y cuando venga no hacéis nada . Maha – Mantra es una invitación. Estad listos y dispuestos a dar la bienvenida a vuestros invitados.
( A contuar ) )
*Damodar Prabhu, Madre Yashoda – en este contexto: discípulos de B.K. Tirtha Maharaj, presentes en su conferencia.