Sharanagati
Collected words from talks of Swami Tirtha„ O, Brama, al igual que los elementos universales a la vez entran y no entran en el Espacio cósmico, Yo mismo estoy en cualquier cosa creada y en el mismo tiempo sigo existiendo en todo por separado.”[1]
En realidad este verso describe el funcionamiento de todas las energías divinas – describe la modalidad de la penetración de estos variados elementos universales en la existencia. Los elementos han existido antes de la formación de los cuerpos. Ellos son la causa material de los cuerpos. El cuerpo se ha formado a partir de la materia y por consiguiente volverá a la materia. El alma proviene del Supremo por alguna vía muy oculta y por consiguiente a El volverá. Con que podemos afirmar que las chispas espirituales – jives van adoptando forma. Esas chispas van construyendo un cuerpo a su derredor y lo realizan a partir de los elementos presentes en el Universo. Si la materia fuera la causa material, debería pues existir algún plan general oculto tras la formación de los cuerpos. Debería existir una causa oculta relacionada con el plan de la creación. Podemos afirmar que dicha causa es la idea, el deseo de jiva. Allí donde haya deseo habrá algunas consecuencias y en acuerdo con los deseos se realizará cuerpo con diferentes aptitudes. Por ello podemos afirmar que el cuerpo es encarnación de la idea. Hay que poner atención en pensamiento e ideas porque de allí resultará el cuerpo correspondiente.
Las formas del cuerpo vienen prestadas de la materia y volverán a la materia. Por lo tanto este océano, este enorme depósito de energía sigue existiendo independientemente de la estructura del cuerpo. Al recoger del océano una sola gota el océano no disminuirá. Al agregar al océano una sola gota el océano no crecerá.
Se trata de un acto extremadamente místico de nuestro Dios – a la vez penetrando en el Universo y quedando separado. En “Bhagavad-gita” El dice: “En una forma no manifestada Yo voy penetrando el Universo entero. Todos los seres vivos están en Mis entrañas pero Yo no estoy en las de ellos. A pesar de todo, la creación entera no está en Mí. En esto consiste Mi poder místico. Siendo el mantenedor de todos los seres vivos y estando presente por doquiera no obstante Yo soy el manantial universal de la existencia.”
Parece contradictorio – El es separado y penetrante a la vez. Esperamos de un Dios que permanezca claro y no contradictorio. ¿Y qué es lo que observamos? ¿Qué es lo que debemos creer? Cuando dice: “Sí, Yo estoy dentro de todo.” O cuando afirma: “Por lo tanto, no estoy.”¿Cómo confiar en estas palabras? Podemos decir que nuestro deber no es de confiar sino de ensalzar estas características. La filosofía consiste en la capacidad de admirar. En la aptitud de decir: „ ¡Vaya! ¡Es grandioso!” Esta es la verdadera filosofía. Pero esto no se acaba con la filosofía. La filosofía no es más que un enfoque en búsqueda de la verdad, no es la verdad misma. Primero debes llegar a ser filósofo y luego llegar a ser tan puro como un niño. Krishna lo dice en ciertos versos: “¿En qué consiste pues la ventaja de esta filosofía enmarañada? Si con la menor partícula de Mi gloria Yo llego a penetrar el Universo entero.”
Poseyendo una visión pura nos resultará más fácil vislumbrar y adivinar este misterio del Supremo Dios Krishna – El está por doquier y en el mismo tiempo logra a preservar Su auténtica identidad individual. Por todo ello podemos afirmar que Krishna es todo pero también que no todo es Krishna. Tomemos como ejemplo una alfombra. ¿De dónde viene el hilo? No viene de las ovejas sino en fin de cuentas viene de Dios. ¿Y de dónde vienen los colores? No vienen de las sustancias químicas ni de colorantes naturales sino en fin de cuentas vienen del Dios Supremo. ¿Y de dónde viene el talento necesario para tejer la alfombra? No viene del tejedor que lo está tejiendo, se da por Dios. Con que en fin de cuentas es manifestación de energía divina – por su origen, materiales, talento, aplicación ya que dicha alfombra se usa en el templo. Sin embargo, no colocamos las alfombras ante el altar para adorarlas. En cierto sentido esto es Krishna y a pesar de todo no es Krishna.
¡Al igual de todos vosotros que estáis aquí! En cierto sentido sois Krishna. Por lo menos un pequeño Krishna, una partícula de Su energía .Por lo tanto no podemos afirmar que vosotros sois Krishmna. Sois semejantes por vuestra naturaleza pero sois diferentes como individuos. Imaginad que tal multitud de Krishnas vienen y van corriendo por aquí y por allá robando la mantequilla de”BILLA” ¡Vaya el gran problema! ¡Con uno ya basta! No hace falta más que un Makanchor[2].
[1] “Shrimad-bhagavatam”2.9.35
[2] Makanchor – El ladrón de Mantequilla, nombre de Krishna