Sharanagati

¿Puedo llamaros la atención invitándoos permanecer vigilantes? ¡Las plegarias se oyen! Por esta razón pensad bien antes de poneros a rezar. La gente suele rezar para cosas muy ordinarias, sin sentido a veces. “¡Dame esto, dame aquello! Quiero tener éxito, quiero tener esposa o esposo, hijos, felicidad… ” Aspiramos tener o adquirir tantas otras cosas. A veces las recibimos, otras veces – no. Por lo tanto este tipo de plegaria estándar es muy elemental y a este nivel no hay demasiados peligros ni obstáculos. ¿Por qué? Sea que en las plegarias rezamos por cosas insignificantes sin impacto alguno, sea que Dios en su misericordia no os proporcionará las cosas nocivas que aspiráis alcanzar.

Sin embargo, estas plegarias[1] que estáis cantando por la mañana, no son de ese nivel elemental de guardería de niños. No, el nivel es de post graduación. Ya que sin mencionar algún deseo, el voto es:

“Por favor, no me des nada de material y si no me dieras nada de espiritual, yo seré Tu servidor incondicional.”

Al adelantarnos en lo hondo y en el sentido de estas palabras, debemos aceptarlas como algo muy serio sentido y profundo. Al proclamar: “No quiero tener nombre, fama, gloria ni prestigio.” O bien al decir: “No quiero tener seguidores”, vuestras plegarias llegarán a cumplirse. Hay que poner atención al rezar: “¡Por favor, Krishna, póngame a Tu servicio!” Él os ofrece algún servicio pero entonces vosotros decís: “¡Pero que no sea ahora! ¿Y por qué yo? Otros son más calificados, por favor, nómbralos.”

Las plegarias se oyen. Debemos poner mucha atención y cuidado en nuestras plegarias. Ciertas doctrinas muy esenciales y positivas se integran a estas plegarias como por ejemplo trinad api sunichena[2]– debéis ser más humildes que el tallo de hierba. ¿Será algo real? Nos supera un poco. Nos supera un poco lo de llegar ser más humilde y bajo que un tallo de hierba. Sin embargo nuestra plegaria debe ser en este sentido. ¿Y por qué el tallo de hierba debe servirnos de gran ejemplo? Es que el tallo de hierba nunca se rebelará, incluso cuando esté aplastado en los pies, nunca responderá al golpe. En este mundo nuestro de libre competencia “no responder jamás al golpe golpeando” – resulta un mensaje desastroso. Será muy desastroso porque en este caso los otros os aplastarán en sus pies. Los otros tienen un modo material de pensar mientas que vosotros aspiráis a lo espiritual – ya tendréis una buena lección.

También debemos llegar a ser más tolerantes que los árboles. Los árboles son muy tolerantes, están listos a proporcionarnos sombra y fruta y hasta nos permiten romper sus ramas para obtener leña. También ellos constituyen un ejemplo espiritual para nosotros. Se ponen a temblar con el más leve vientecillo. ¿Por qué? Porque hace recordad la suave brisa de la montaña de Malaya que lleva consigo fragancia de bosques de sándalo. Se supone que los árboles tienen un nivel superior de conciencia unitaria que los humanos.

Los árboles deberían tener un nivel de conciencia inferior que el de los humanos. En estos niveles de existencia elemental la conciencia sería más bien unificada y no individual. Se suele decir que cuando aparezca alguna enfermedad en un bosque, los árboles que se encuentren lejos del bosque también se contagiarán. Sería debido a su área unificado de conciencia.

Del mismo modo los árboles de los tiempos de Mahaprabhu o los árboles de

Vrindavana recordaban la brisa suave de bosque de sándalo y nosotros también al ver los árboles de Vitosha debemos recordar cada vez que si se ponen a temblar, será debido a la éxtasis. ¿Cuándo comenzaréis a temblar de éxtasis? Estamos muy lejos del ejemplo que nos ofrecen los árboles. Una suave brisa – ya viene la éxtasis; una gran dosis de mensaje espiritual – y no nos ocurre nada.

A veces los árboles son tan desinteresados que ni caben en nuestra imaginación. Están listos a dejar que se sequen sus ramas y los dejan caer en el suelo para servirnos. Yo sólo quisiera sugerir la demasiada complicación del servicio votivo: en ciertos ritos, para cocinar la comida votiva hace falta ira al bosque, encontrar un árbol bien definido, luego debéis encontrar la rama que ha crecido dirigida al norte y esta rama debe estar caída en el suelo – sólo entonces podéis usarla como leña de cocinar. Imaginad pues que debéis realizar los ritos votivos con estos accesorios – resultará casi imposible.

Por esta razón Mahaprabhu ha dado una idea diferente. “Sé tan humilde como el tallo de hierba, sé tan tolerante como el árbol y sólo entonces llegarás a ser capaz de cantar los nombres santos.” Con esta idea suya Él nos ha dado la clave de la solución. Nuestra humildad y nuestra tolerancia deben tener una meta – cantar los nombres santos, llamar a Dios por medio de Su nombre. Las plegarias se oyen.

Cierta gente cree que las plegarias han pasado de moda, que sólo son apropiadas para las ancianas en los templos. Tengo que deciros: No, no son prácticas anticuadas caídas en desuso. ¡Debemos revolucionar las plegarias! A pesar de que yo no sea del tipo revolucionario, en este sentido considero que sí, debemos realizar un gran cambio en nuestros hábitos de rezar.

El cambio ése se verá reflejado en el último verso. „Soy servidor Tuyo sin hacer caso de si me dieras o no me dieras cualquier cosa. Tu servidor incondicional.”[3] Siempre que pongamos algunas condiciones, el servicio nuestro no será verdadera adquisición.

[1] Shikshastaka plegarias

[2] Shikshashtaka

[3] Shikshashtaka 8